¿Y quién dice que hacer Actividad Física es una obligación?

TÚ ERES TU PRINCIPAL PRIORIDAD, TRABAJA POR Y PARA TI

La motivación: TU MEJOR MOTOR para alcanzar el éxito.

“Motivarse es desear y decidir hacer algo”

Con el tiempo la psicología se ha hecho cada vez más experta en las distintas áreas de estudio que aborda, en donde se pueden encontrar términos como la percepción, el lenguaje, la inteligencia y la motivación, siendo ésta última, la más utilizada, por su afán de comprender la actividad humana como un factor imprescindible para explicar las causas de algunas conductas de los individuos, entre ellos el comportamiento hacia la actividad física y el deporte. En este sentido, la motivación es utilizada como prioridad para el estudio de esta disciplina, no sólo desde la perspectiva del deportista que compite, sino también del ciudadano común que desea alcanzar un mejor estado de salud y reducir sus niveles de sedentarismo.

La motivación es uno de los conceptos más utilizados en psicología debido a su presencia en todos los ámbitos de la vida, siendo considerada como una pieza fundamental en la explicación de determinadas conductas del ser humano.

En cuanto a la actividad física, la motivación es concebida como una temática importante en donde la condición fundamental para obtener el éxito o resultados esperados es la frecuencia, duración, esfuerzo, intensidad, concentración y constancia, la cual trae como consecuencia numerosos beneficios para la salud de las personas, además de divertirse y estar en forma.

¿Cómo se entiende la actividad física?

• La actividad física como una experiencia social: una manera de satisfacer necesidades sociales y en algunos casos, hacer nuevas relaciones interpersonales o de conservar las ya existentes. 
• La actividad física como búsqueda de nuevas experiencias y nuevas sensaciones: Se buscan actividades de riesgo, velocidad y emociones nuevas. 
• La actividad física como una experiencia estética: en este sentido los individuos incluyen actividades que implican la belleza, simetría, gracia u otras cualidades artísticas (ballet, danza, natación sincronizada, entre otros.). 
• Actividad física como catarsis: Se incluyen actividades como un medio para aliviar tensiones y dejar escapar emociones reprimidas.

Entonces, es aquí donde surge la interrogante:

¿Valdría la pena invertir tiempo en algo que te haga feliz?

¡Por supuesto que sí!!, así como la vida nos enseña a enfrentar cada reto que se nos presenta, así como somos valientes y fuertes para seguir adelante, así como nos adaptamos a la nueva realidad y “normalidad”, así como somos pacientes para reinventarnos y seguir luchando hasta que nos salen bien las cosas, de la misma manera debemos responder a nuestras necesidades individuales, aquellas que nos permite ser nosotros mismos en toda nuestra esencia. Es por ello, que te invitamos a realizar actividad física, sea cual sea la disciplina que más te agrade, incorporemos a nuestros familiares y amigos, en especial, no dejemos que la motivación decaiga.

También es cierto que lo primero que nos viene a la mente es “no tengo tiempo”, por las múltiples responsabilidades diarias del hogar, personales y laborales, pero, ¿te digo algo? si nos organizamos y planificamos, tendremos nuestro merecido espacio de tiempo y una vez que lo fijemos como parte fundamental de nuestro día a día; nadie nos lo podrá quitar.

El ejercicio se realiza con el cuerpo, pero, es la mente la que desea y decide empezar el movimiento de los músculos para realizar actividad física y por lo tanto, para empezar o ser constantes con el ejercicio debemos de convencer en primer lugar a nuestra mente.

Así que comienza a practicar e internalizar los siguientes tips:

• Duerme bien y aliméntate de manera balanceada.
• Define tus metas
• Piensa en el beneficio inmediato. Es bueno para tu salud física y mental.
• Imagina lo que pierdes si no lo haces 
• Decide cuándo comenzar
• Empieza dando pequeños pasos
• Implementa hábitos que te motiven
• Rodéate de personas que te inspiren
• Escribe cómo te sientes después de cada entrenamiento
• Recuerda el por qué empezaste
• Visualizar el resultado final, a donde quieres llegar, tener visión, es fundamental.
• Usa el fracaso como motivación, tener tropiezos también es parte del crecimiento.
• Celebra cada progreso, te ayudará a sentirte satisfecho y a mantener constancia para llegar a tu objetivo.
• Utiliza recompensas
• Lleva un seguimiento de tu constancia y compártelo.
• Es la mayor y mejor inversión en tu vida.

Y recuerda siempre, realizamos actividad física porque queremos y nos hace felices,

NO POR OBLIGACIÓN.